Carita chata, ojos achinados
boquita que jura: ¡Me bua’ portar bien!
Naciste olvidado, sin cuna, con frío
y una manta vieja que no daba abrigo
te cubrió la piel.
Tu casa es un rancho con piso de tierra
y un techo de chapas que calienta el sol.
Que destino espera
tus sueños chiquitos
con remera vieja
y hambre de ayer.
Un estado ciego se lava las manos
gente indiferente cruza y no te ve.
Pero vas andando, sin saber qué pasa
¿Por qué mamá llora y papá se fue?
Te duele la vida, tus manos vacías
y un mundo apurado te mira sin ver.
Querida maria rosa, cuanta ternura me despierta tu poesia;
ResponderEliminarsi puede despertar compasion,
quizas no todo este perdido en este mundo que mira sin ver.
Un abrazo grande.
Hola Hadita, hace unos años colaboraba en un hogar de chicos de la calle, allí nació este poema, que es duro como la realidad de algunos chicos.
EliminarGracias, un abrazo.
Hay mucha ternura en tus versos, felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Rafael.
EliminarUn abrazo.
Preciosa esa carita finde la dulzura nos envuelve
ResponderEliminarUn besazo y muy feliz miércoles.
Gracias Campi, otro beso para vos.
Eliminarmariarosa
Tremendo y hermoso a la vez. Besos
ResponderEliminarEs la vida de los chicos de la calle, a veces los veo y sueño con un mundo mejor para ellos, algún día llegará.
EliminarAbrazo.
Muy hermoso y muy emocionante.
ResponderEliminarLleno de ternura.
Un abrazo.
Gracias Amalis, un abrazo.
EliminarQue bonito María Rosa y que cierto tu último verso.
ResponderEliminarUn poema entrañable que cuenta el día a día de un niño como seguramente habrá muchos por ahí.
Me ha gustado mucho.
Un abrazo.
Hola Elda, traté de darle vida a una verdad que se ve en todos los barrios. Abrazo agradecido.
EliminarQuerida amiga, precioso poema, lleno de ternura que muestra la indiferencia del mundo.
ResponderEliminarUn placer visitarte.
Querida y dulce amiga, paso a desearte un feliz día, con mucho amor, sé feliz. Que Dios te colme de bendiciones.
♥️Abrazos y te dejo besitos♥️
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Hola Liz, un gusto verte por mis letras, eres siempre bienvenida, gracias y bendiciones.
EliminarLindo poema. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias Judit, otro beso para vos.
EliminarUn poema solidario, que nos conecta con esos "villeritos olvidados", que sobreviven y se preguntan tantas cosas, sin entender porqué les tocó vivir tanta penuria injusta...Precioso y muy emotivo, María Rosa. La poesía nos acerca a los seres que sufren, profundizando en las circunstancias de la vida.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y admirado por tu humanidad y buen hacer.
Hola María Jesús, eres muy amable en tus comentarios, te agradezco tus palabras.
EliminarMe encanta esta poesía tuya de mirada social que testimonia conmovedoramente las historias de gente común que pasan demasiado cerca de nosotros pero que algunos prefieren ni mirar...
ResponderEliminarAbrazo sin sombrero una vez más.
Hola Carlos, he colaborado en hogares de chicos de la calle y a pesar de su vida dura son pura ternura. Me alegra que te haya gustado.
Eliminarmariarosa
Triste historia la del villerito que aun siendo niño siente ya los embates de la vida.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias Cecilia, un abrazo.
EliminarQue uno quisiera que ya no hubieran más Villeritos por el mundo...
ResponderEliminarcuanto hemos de rendir frente a Dios...!
Un abrazo.
Buen pensamiento Magdalena. Gracias por pasar a leer.
Eliminarmariarosa