Te acompaña el río, árbol
solitario
Cabalga la tarde por su
piel serena
Y en el se reflejan tus
ramas de otoño
y tu estás tan quieto
Que pareces muerto.
Un barco lejano te mira y
suspira,
Quién ha dejado ese árbol
tan solo
Parece tan triste,
perdido en el río
Solitario al viento con
hojitas secas
Que quieren quedarse y la
brisa las lleva.
Al llegar la noche la
luna lo besa,
Al alba las aves juegan
en sus ramas
Pensando en el nido y en su copa llena.
Y el árbol sonríe, sueña primaveras
Con coro
de pájaros, borrando tristezas
Y un verde brillante creciendo
en sus hojas.
Llegará la fiesta, verano
mediante
Y el agua del rìo en su
piel serena
Reflejara un árbol con su
copa plena.