El sol agoniza entre nubes
rojas,
sangre de estrellas que olvido
la noche.
El reflejo ruboriza la aguja de
los pinos,
los besa, y se pierde como un
suspiro.
Una suave melancolía se respira
en el aire,
es la frialdad de la noche que se acerca,
la brisa se desprende del
verdor y lo duerme,
arropa el paisaje y lo vence
con su quietud.
Adoro ese momento. Es la calma que invita a sentir.
ResponderEliminarPrecioso cómo lo describes
Un abrazo grande
A veces las palabras nacen solas con sólo observar el paisaje, los pinos y ese último reflejo de sol los ruboriza.
EliminarGracias María.
Las letras que acompañan a tu imagen dan mucho valor de ella , pues son palabras que te nacen y reflejan tus pensamientos .
ResponderEliminarUn abrazo y feliz noche.
Otro abrazo para vos Campirella, gracias por pasar a leer y felicidades.
Eliminarmariarosa
Se acerca la noche, los sueños a flor de piel, las antenas de los anhelos a punto, se abre el telón de un atardecer.
ResponderEliminarLindo poema. Un abrazo
Me alegra que te haya gustado. Un abrazo Albada y gracias.
EliminarMariarosa.
La vocación de la noche que se acerca, toda la paz que nos brinda y las moltalgias que deja, se ha convertido en un delicioso poema.
ResponderEliminarUN ABRAZO Y QUE DISFRUTES DE UNA FELIZ SEMANA.
Hola Fraziska, el atardecer es el momento de la paz y más aún si estas rodeada de campo y cielo.Gracias por tu visita.
EliminarMariarosa.
Se puede sentir en la piel ese instante cuando el sol cede y el aire se torna frio , uno atesora en sus pupilas la magia de sus reflejos y aprecia la calma precursora de la noche.
ResponderEliminarAsi es Javier, tu comentario es todo un poema, gracias. Un abrazo.
EliminarMariarosa
Que preciosa puesta de sol en tu poesía, y lo he disfrutado como si estuviera viendo el paisaje que atesoras en tus letras.
ResponderEliminarUn placer y un abrazo.
Elda,gracias por tu visita y tus palabras. Abrazo.
ResponderEliminarMariarosa
Hola Maria Rosa; precioso poema al atardecer. Leyendo me viene al pensamiento las veces que junto a mi marido nos ibamos a la orilla del mar al atardecer y mirabamos la entrada del sol y sus preciosos colores rojizos. Un abrazo
ResponderEliminarBellas evocaciones, me alegro haber sido portadora de buenos recuerdos.gracias por tu compañia.
EliminarMariarosa.
Bonitas letras sobre el atardecer, y la imagen preciosa.
ResponderEliminarBesos Maria Rosa.
Gracias Rafa, por tu compañia y comentario.
ResponderEliminarMariarosa.
Ese momento tiene magia en el alma del poeta....bellas tus letras....saludos
ResponderEliminarAsí es, la naturaleza es inspiradora de poesía.
EliminarGracias Sandra.
Cariños.
Uy me dejaste sin palabras, hermoso poema y bella fotografía. Te mando un beso
ResponderEliminarHola Alexander y gracias por tu visita.
Eliminarmarirosa
Los atardeceres siempre nos dejan ese halo de misterios,
ResponderEliminarun ansia de volar también...
besos
Mistetio y placer a los ojos y al corazón.
EliminarGracias Magdalena.
Mariarosa
Junto al amanecer, son las mejores horas del día. No lo has podido describir mejor.
ResponderEliminarBesos
Comparto tu penamiento. Gracias.
EliminarMariarosa
Estamos teniendo unos espectaculares atardeceres, sin ir más lejos, ayer a las 18.30 estaba todo el cielo plomizo excepto el oeste que lucía tal cual lo describís en el poema. El cielo un poema, tu poema una magistral pinturita
ResponderEliminarFelicitaciones!
Beso
Gracias Frodo. El cielo de ayer era una belleza, me la pasé sacando fotos porque era magnifico ese atardecer. Un abrazo.
EliminarMariarosa.
Una fantástica imagen para acompañar un hermoso poema.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias Amalia por tus palabras y por estar siempre.
Eliminarmariarosa
Algo se termina, algo muere; algo comienza, algo nace.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Un círculo, eso es la vida y se va repitiendo continuamente. Gracias José.
Eliminarmariarosa
La belleza, la magia...está ahí, al alcance de los ojos. Solo hay que saberla sentir, vivir...
ResponderEliminarCariños, poeta.
Gracias Soco, te dejo un abraz.
EliminarMariarosa.
Gracias María Rosa, por este bello atardecer que nos regalas, lleno de luz, frescura, calma y serenidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ambar